SANUTRI: La importancia del gateo | SANUTRI

martes, 15 de enero de 2013

La importancia del gateo

Foto: Ben Klocek
El tiempo pasa volando, ¿verdad? Hace nada el peque estaba todavía en tu barriga y ahora ya estáis pensando en sus primeros pasos. Para llegar a ellos, la mayor parte de los bebés pasan por una fase intermedia: ¡el gateo!
 El gateo no es más que la primera forma de desplazarse que aprende el peque, normalmente entre los 6 y los 10 meses, antes de tener la suficiente fuerza y equilibrio como para echarse a caminar. Si bien es muy importante porque ayuda a la conexión entre hemisferios cerebrales y ejercita la coordinación y la psicomotricidad del peque, no hay que obsesionarse si se salta esta etapa.
En primer lugar hay que tener en cuenta qué se entiende por gateo: no solo el clásico desplazamiento a cuatro patas, sino cualquier modalidad que escoja el peque. Hay algunos que se mueven sentados, ayudándose de las manos y las piernas y arrastrando el culito; otros se desplazan boca abajo, arrastrando la barriga y ayudándose de brazos y piernas; otros peques optan por rodar… ¡Lo importante es que se mueva! 
  •  En esta etapa el peque estará iniciándose en el mundo de la coordinación, explorando lo que le rodea y fortaleciendo poco a poco espalda y piernas para poder pasar de estar sentado a ponerse de pie y caminar.
  • ¿Qué hacer si el peque se salta esta etapa? ¿Debemos preocuparnos? Tan solo si ves que realmente tiene problemas de coordinación: pero si pasa de estar sentado a caminar y lo hace bien, no pasa nada. ¡Simplemente ha escogido un camino distinto para llegar a sus pasitos!
  • Como en todo, en esta etapa es muy importante que aceptes el desarrollo natural del peque y que no le obligues a nada. Sí puedes animarlo a desplazarse poniendo sus objetos preferidos a un poco de distancia o simplemente diciéndole que se acerque despacito a ti. Déjale espacio libre (¡es muy importante que no haya muchos obstáculos que podrían ser peligrosos!) y anímalo a moverse. Y si no quiere, no pasa nada.
  • Lo mismo para caminar: si el peque está feliz gateando, acabará por ponerse a andar antes o después, no es necesario empezar muy pronto a intentar que dé sus primeros pasitos. ¡Respeta su ritmo! 
 ¿Ya ha empezado a gatear el peque? ¿Qué método ha escogido?

No hay comentarios:

Publicar un comentario