El Ministerio de Sanidad y las Comunidades Autónomas han acordado un plan para limitar la venta de bollería industrial y refrescos en los colegios. Una buena noticia para los que, como Sanutri, aúnan esfuerzos en reforzar el hábito de la comida sana.
Este tipo de alimentos, la bollería y los refrescos, suelen estar al alcance de los más peques en los centros escolares: en las máquinas expendedoras y cafeterías de los coles. Con esta decisión se pretende limitar el contenido calórico de los productos que los niños puedan comprar entre clase y clase. Una apuesta en firme por la prevención de la obesidad infantil y la obligación de ofrecer comida “sana” en los comedores de los centros.
No sólo Sanutri considera útil este plan, también nutricionistas, pediatras y endocrinos tienen esta misma opinión. Todos coinciden en puntualizar que la educación sobre una buena alimentación debe iniciarse en el seno familiar, aunque explican que este tipo de medidas colaboran en la prevención de los malos hábitos.
No se trata de una prohibición total, si no de un conjunto de recomendaciones que todas las Comunidades han firmado. No hay sanciones para aquellos centros que no lo cumplan.
La finalidad de este tipo de propuestas es limitar la venta de bollería industrial y refrescos para ayudar a que nuestros pequeños coman más sano y tomen conciencia de una alimentación saludable.
Este tipo de alimentos, la bollería y los refrescos, suelen estar al alcance de los más peques en los centros escolares: en las máquinas expendedoras y cafeterías de los coles. Con esta decisión se pretende limitar el contenido calórico de los productos que los niños puedan comprar entre clase y clase. Una apuesta en firme por la prevención de la obesidad infantil y la obligación de ofrecer comida “sana” en los comedores de los centros.
No sólo Sanutri considera útil este plan, también nutricionistas, pediatras y endocrinos tienen esta misma opinión. Todos coinciden en puntualizar que la educación sobre una buena alimentación debe iniciarse en el seno familiar, aunque explican que este tipo de medidas colaboran en la prevención de los malos hábitos.
No se trata de una prohibición total, si no de un conjunto de recomendaciones que todas las Comunidades han firmado. No hay sanciones para aquellos centros que no lo cumplan.
La finalidad de este tipo de propuestas es limitar la venta de bollería industrial y refrescos para ayudar a que nuestros pequeños coman más sano y tomen conciencia de una alimentación saludable.
Vía: bebesymas.com
Imagen: Koluso
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