Foto: peasap |
¿Qué
tal lleva el peque estos madrugones de la vuelta al cole? Hay niños
que se adaptan enseguida pero a otros (al igual que ocurre a los
adultos) les cuesta mucho más levantarse temprano o espabilarse.
¿Cómo
hacer que esa transición del sueño profundo a la vigilia sea más
suave y sencilla? Desde Sanutri, expertos en alimentación infantil
desde hace más de 45 años, te damos algunos consejos.
- Que el peque se acueste temprano. Esto es sin duda lo más importante: el peque tiene unos tiempos de sueño que es necesario respetar, por lo que, si tiene que levantarse temprano, lo ideal es que se acueste temprano. Cenad todos pronto e intentar no hacer mucho ruido una vez que el peque esté durmiendo.
- Haz que el momento de despertarse no sea traumático. Despierta al peque con calma y con unos 10 o 15 minutos de margen. Evita los gritos y las prisas, solo harás que el peque odie cada vez más madrugar y, además, relacione esos malos momentos con ir al cole.
- Prepara un buen desayuno. Que el peque sepa que al despertarse pronto tiene premio: un desayuno rico y completo con el que empezar el día. Y, una vez más, hazlo todo con tiempo para que pueda desayunar tranquilo y a su ritmo.
- ¿No os da tiempo? Pon un poco antes el despertador (y acuesta al peque un poco antes). ¡Las prisas por las mañanas no son buenas consejeras!
Por
último, es importante tener siempre muy presente que cada
peque tiene su propio ritmo.
Habrá niños a los que no les cueste despertarse y otros que
necesiten bastante tiempo para ir espabilando. Fíjate en cómo es tu
peque y qué necesita e intenta adaptarte en la medida de lo posible.
No hay comentarios:
Publicar un comentario