Todos sabemos que cuando llega el calor, tenemos muchísimas ganas de tomar el sol y pasar tiempo en zonas calurosas. No obstante, tenemos que tener en cuenta que la piel es delicada y hay que tomar precauciones. Sobre todo para el peque, ¡que tiene la piel muy sensible!
Foto: Boudewijn Berends |
Des de Sanutri, expertos en alimentación infantil des de hace más de 45 años, queremos darte unos consejos para evitar que los primeros rayos de sol sean perjudiciales para la piel.
Es importante que controles el tiempo que van a estar expuestos al sol, puesto que en la actualidad las radiaciones solares son más agresivas que en el pasado. Por supuesto que con el sol hay que tener mucho cuidado y seguir una serie de consejos, pero tomado con cautela tiene muchos efectos beneficiosos para el organismo, ¡así que también toca disfrutarlo con tu peque!
- Debes saber que si tu peque tiene menos de 6 meses, no es recomendable exponerlo al sol, ya que su piel es muy sensible, y puede quemarse y deshidratarse con facilidad. Además, cuando son tan pequeñitos tampoco es conviene aplicarles crema solar.
- A partir de los 6 meses pueden estar al sol, aunque poco tiempo y bien protegidos (con crema solar, gorrito y/o camiseta) y nunca en las horas centrales del día.
- Es importante que tengas en cuenta que los rayos ultravioleta del sol pueden ser muy dañinos para sus ojos, ya que sus cristalinos dejan pasar más radiación que la de un adulto. Por eso es importante, a partir del primer año, empezar a acostumbrarle a utilizar gafas de sol, que estén homologadas por la UE y adaptadas especialmente a ellos.
- Lo ideal es no exponer a los niños al sol entre las 12 y las 16 horas.
- Hay que proteger la piel de los peques con cremas, de FPS alto o muy alto y sobretodo que sea resistente al agua ¡ya sabemos lo que les gusta mojarse!
- También es aconsejable para proteger la piel, sobre todo si van a estar expuestos al sol durante un periodo prolongado de tiempo, utilizar ropa de tejidos frescos (algodón) y sombreritos.
- Aunque esté nublado o el peque esté debajo de una sombrilla, siempre debes ponerle crema solar, ya que a través de estos elementos se filtran las radiaciones infrarrojas pero no los rayos ultravioleta. Lo mismo ocurre dentro del agua o cerca del agua, que los rayos del sol se reflejan en ella y puede aumentar la posibilidad de insolación.
- Después del sol es bueno darle un baño con agua templada, para que quede fresquito y además para eliminar restos de cloro o de sal. Además, después del baño es necesario utilizar un AfterSun para hidratar su piel.
Es importante que controles el tiempo que van a estar expuestos al sol, puesto que en la actualidad las radiaciones solares son más agresivas que en el pasado. Por supuesto que con el sol hay que tener mucho cuidado y seguir una serie de consejos, pero tomado con cautela tiene muchos efectos beneficiosos para el organismo, ¡así que también toca disfrutarlo con tu peque!
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